Padre Santo, que enviaste a tu Hijo al mundo a proclamar la llegada de tu Reino,
y con la fuerza del Espíritu Santo conduces a esta comunidad misericordiosa a través de los siglos:
Como miembros de la Iglesia, conmemoramos con gozo el 175 aniversario de la aparición
de nuestro Señor Jesucristo en el cielo de Ocotlán;
y unidos a nuestro Obispo, renovamos el compromiso de seguir celebrando la fe
y anunciando el Evangelio a través de la gran misión de la misericordia.
Somos continuadores de una tradición de discípulos misioneros
que han sido testigos de la misericordia en medio de nuestro mundo.
Te pedimos que nos transformes en piedras vivas de esta Iglesia
que es el Cuerpo Místico de Cristo, a fin de ir construyendo
una sociedad más justa y fraterna, por el mandamiento del amor.
Señor de la Misericordia, acompáñanos en nuestro peregrinar por las sendas de la vida. AMEN
